2. 3 Los mensajes de los animales y sus significados
¿Qué mensajes incorporan y que significados pueden tener para quienes los escuchan?
Lo primero que resulta evidente, como todo observador de pájaros sabe, es que el canto suele ser claramente distintivo entre las especies, de modo que incluye información respecto a aquella a la que pertenece el cantor. Lo que es más, los cantos suelen ser producidos únicamente por machos adultos en de reproducción tienden a entonarlos sólo cuando tienen un territorio y en algunos casos dejan de cantar en cuanto tienen pareja.
En tales casos, el mensaje del canto podría ser: “soy un macho adulto de carricero común sin pareja y con territorio propio además estoy en fase de reproducción”. Además el mensaje puede incluir diferentes sutilezas. Las señales varían a menudo de un lugar a otro, formando dialectos como los del lenguaje humano.
También los animales presentan idiosincrasias individuales en cuanto a la forma de las señales y utilizan toda una serie diferente para transmitir información sutilmente distinta. El ave que canta puede, así, decir de donde procede, quién exactamente y tal vez incluso algo sobre su motivación, si el canto difiere según esté dirigido a sus rivales o a sus parejas potenciales.
Como los cantos de las aves, muchas señales están relacionadas principalmente con la reproducción: su principal papel en la comunicación es atraer parejas y repeler a los posibles rivales.
En cualquier caso, en particular en las aves que viven en grupos sociales, pueden resultarles útil transmitir otros muchos mensajes. Los animales que se desplazan en grupos a menudo muestran patrones obvios que pueden verse desde cierta distancia y les permiten mantenerse en contacto con sus compañeros.
Las notas de llamada pueden desempeñar una función similar, especialmente cuando la visibilidad es poca. Se trata de sonidos simples y patrones sencillos, y que tienden a variar muy poco. Su mensaje puede ser sencillamente “miradme que estoy aquí”. Hay casos en que, a pesar de su simplicidad, varían lo suficiente como para indicar la identidad.
Un caso muy propósito es el del delfín mular (desgraciadamente este año han muerto numerosos ejemplares en las costas de todo es mediterráneo producto de un virus neurotrófico que parece una pandemia): se trata de llamadas individualmente distintivas, producidas tanto por el grupo como por el individuo solitario cuando un animal se separa de su grupo y que, por tanto, parece servir de ayuda a la cohesión de este.
Las llamadas de alarma son un ejemplo de otro tipo de mensaje. En este caso, los individuos advierten a sus compañeros de la presencia de un peligro. La llamada “sip” de las aves pequeñas es generada con casi absoluta seguridad por la aparición de un halcón, pero, durante la época de reproducción, las aves con crías también pueden generar esta llamada cuando les asusta un perro o un humano se acerca a su nido. La mayoría de las señales, de los animales son as: el mensaje que transmiten es un mensaje generalizado, en vez de ser preciso como el de una palabra en el lenguaje humano.
Una excepción curiosa que es saliente en casi todos los manuales que he consultado es el de la señal de alarma del cercopiteco surafricano. Estos animales emplean varias llamadas diferentes cuando se sienten asustados, y tres de ellas son específicas de tipos concretos de depredador: llamada de serpiente, llamada de leopardo y llamada de águila. Aquí la información que transmite es muy precisa: el animal que la emite igual podría ser “serpiente”, “leopardo” o “águila”.
¿Qué hacen los congéneres cuando oyen esas señales de la alarma? Es decir ¿qué significado tiene para ellos? La respuesta es que el mensaje queda también definido con gran precisión. Los animales que oyen la llamada de leopardo trepan a toda prisa a los árboles, los que responden a la llamada de águila bajan a tierra y se ocultan entre la espesura, mientras que la llamada de serpiente, les lleva a cercarse y mirar hacia abajo. No podemos saber si tienen una imagen mental del depredador en cuestión., pero desde luego se comportan como si fueran conscientes del tipo de amenaza potencial que plantean.
Este tipo de llamadas se denominan “referenciales” porque hacen referencia a algo perteneciente al mundo exterior, en ese caso un depredador. Por contraste, la mayoría de las señales animales son “afectivas” y transmiten mensajes más generales sobre el estado interior del animal que las produce.
Pienso que es importante para entender los mensajes tener en cuenta el contexto en el que se producen, es decir las situaciones particulares de su ocurrencia. En el caso de una llamada específica de la especie, por ejemplo, los miembros del grupo pueden aproximarse para que éste se mantenga unido; los animales de otros grupos pueden mantenerse alejados; los depredadores pueden sentirse atraídos por la perspectiva de una comida; y los animales de otras especies probablemente la ignoren como irrelevante para sus intereses. Así pues, las misma señal puede tener muchos significados dependiendo de su receptor y del contexto exacto en el que es recibida.
El factor crítico es que para que se produzca una señal, las ventajas obtenidas por su emisor han de compensar los riesgos en que este incurre. De lo contrario, no habría motivo para que la evolución favoreciera la emisión de señales.
Por lo que se puede decir que hay muchos mensajes diferentes que pueden trasmitir los animales, aunque es infrecuente que sean demasiado precisos. Lo más común es que sean llamadas afectivas, que ofrecen una información un tanto general sobre el estadote motivación del emisor de la señal, aunque sus características pueden incorporar también información más precisa como la correspondiente a la especie o a la identidad.
El número de señales que usa una especie no suele ser elevado. Lo que hace flexible y variado al sistema de señalizaciones que es la misma señal que puede significar muchas cosas diferentes para los diversos receptores, y el mismo animal puede responder a ella de diferentes formas respondiendo según el contexto en que es recibida. Con un repertorio un tanto limitado de señales bastante estereotipadas, los animales pueden transmitirse unos a otros todo un acervo de información.